No lo tenia fácil, Curry con su capitanía, Ontinyent esperaba una esplendida capitanía y así ha sido, Su Abuelo Turegano estaría orgulloso de ver a su nieto capitán del bando moro. Ha sabido Enrique Micó, involucrar a muchos amigos para que se volcarán en una capitanía como algo propio y así ha sido, todos los miembros de la comparsa han estado ahí al pie del cañón. Desde el espectacular Ballet del inicio, hasta los elefantes que precedían al Capitán y cerrando la escuadra del primer tro, con los hermanos Climent, gran trabajo en la sombra el de Alberto. Pero no olvidemos los jinetes con las bandeloras, el paladín portado por jóvenes kabilas, y las amazonas a lomos de los camellos. Una capitanía, que ha sabido responder a la expectativa creada en la ciudad. Que ni la lluvia caida con la llegada del capitan a la plaza de la Concepción ha podido deslucir.
Pero no ha sido para menos el boato de la Embajadora y la abandera, Ana y Laly, con un ballet el de Master que ha sabido sacar a la calle una indumentaria espectacular basada en pavos reales, Invirtiendo el orden habitual de las entradas, así los primeros en desfilar han sido los trajes de gala de al comparsa quienes han abierto el boato de esta multitudinaria y cuidada embajada y abanderada mora, que se verán las cara a los pies del Castillo con símiles cristianos.
